Raven Hex ha atrapado a Lord Thornwic, el espadachín del dios cornudo, en su libro maldito de las sombras durante más de un año. Ahora desconocido para Raven, su Acólito, alimentado por la ira y la venganza, afila su espada y se pone en marcha para liberar a su amo y matar al que lo atrapó.

Jean-Claude Gal, en colaboración con Jean-Pierre Dionnet al guión, publicarón en 1977 los Ejércitos del Conquistador. Originalmente apareció publicada en la revista Metal Hurlant francesa, y poco después en España en los primeros números de la revista Totem. Compuesta por cinco historias sin conexión entre sí, Jean-Claude Gal comienza a labrarse con su increíble dibujo su posterior fama de: obsesión casi maníaca por los detalles.

El comandante Vásquez y el hechicero Accursio Medicis, de la Orden de las Cenizas, están buscando la Ciudad de Oro. En la persecución, Hannibal Meriadec y sus tropas son emboscados en el medio del río Orinoco. Sólo consiguen salvarse gracias a la intervención de su hija Lilith, que alza un ejército de muertos contra los soldados españoles. Esta ayuda improvisada no es suficiente para tranquilizar a los aliados de Hannibal, que tarde o temprano esperan que la hija atente contra la vida de su padre. Lo único que la motiva es el oro, el oro y Satanás. A menos que se equivoquen. Después de todo, ni el Sr. Puck ni la dama Elween pueden afirmar conocer el alma de Lilith. Y su alma es abisal.

Después de haber escapado por poco del hotel infestado de bots cazadores en el último número, Robyn, Golem y su nueva amiga tratan de reagruparse en los túneles bajo la ciudad. Pero algo no va bien, y este grupo de aliados va a ser puesto a prueba. Mientras tanto, los planes más grandes de la alcalde se revelan y no pinta bien para nuestra arquera de capucha verde, ¡ya que esta serie empieza a calentarse!